jueves, 5 de junio de 2014

DELENDA EST MONARCHIA


Interesantísimo el programa "Espacio abierto" emitido por TV Murciana en la noche del 5 de junio que reunió a los profesores de Historia Contemporánea de la Universidad de Murcia Alejandro García García y Pedro Mª Egea Bruno y al periodista José Luis Vidal Coy en torno a la mesa de discusión sobre el tema "Después de la abdicación"
Alejndro García García
En un distendido y documentado intercambio de opiniones se comenzó por hablar de la legitimidad de la monarquía, un régimen que se transmite por vía vaginal en un proceso en que se pasa de Franco a Juan Carlos y de Juan Carlos a Felipe, siempre sin pasar por las urnas.

Pedro Mª Egea Bruno
La constitución de 1978, a la que se apela como legitimadora del orden monárquico se proclamó en medio de unas condiciones en las que resultaba imposible votar en libertad y se hacía creer que había que optar por esa constitución o el caos.

Posteriormente, en medio de unas condiciones de enorme inestabilidad, la única manera de disciplinar a la población
era a través del miedo, y desde esa perspectiva tenemos que interpretar la importancia que para ello tuvo el 23 F.
José Luis Vidal Coy
Si en los momentos actuales se manifiesta la crisis de la monarquía, no es sólo esta institución la que se encuentra en esta situación, sino que todo, absolutamente todo, está en crisis. Así, el lema "No nos representan" es real, y la crisis de la monarquía no es más que la punta del iceberg de una crisis sistémica; si el sistema no nos sirve, tampoco nos sirve la monarquía ni la carta magna que lo rige.

¿Por qué la monarquía elige este momento para cambiar su cabeza visible?: Porque ahora todavía se dispone de una mayoría parlamentaria dócil. Se han elegido de manera inteligente los tiempos, nada es inocente, todo está calculado; por eso todo lo han hecho tras las europeas.

Se avecina un calendario electoral muy complejo, incrementado por la discusión de los próximos presupuestos del estado; y después de las elecciones autonómicas, vendrán las generales. además, el traspaso de poderes había que hacerlo con PSOE todavía controlado por Rubalcaba y manteniendo el control sobre los medios de comunicación. De ahí que el mes de junio haya supuesto la fecha más apropiada, fecha acordada por los poderes implicados.

En la pervivencia del régimen monárquico colaboran el bipartidismo y los grandes medios de comunicación, detrás de los que se encuentra el gran capital. Se plantea ahora el cambio, cuando se intuye el principio de los procesos transformativos de la sociedad.

"Delenda est monarchia", como en 1930 dijo Ortega y Gasset, y del mismo modo que ocurrió con el reinado de Alfonso XIII, el cambio de régimen pasa por las urnas, por la elección de unas cortes constituyentes.
Un referendum, por si, no garantiza el cambio; por el contrario, sin pasar por el necesario proceso de discusión, sería  perdido por los partidarios de la opción republicana, pero hay que plantearlo. Hay que plantear esta consulta que nos podría aclarar las necesidades reales de la gente, pero el referendum se debe plantear como el acto final de un largo proceso de debate público y social para que la ciudadanía interrprete los argumentos de estos debates y crezcan como seres conscientes y responsables.
Para ganar el referendum es preciso llegar a un pacto que coordine las fuerzas antidinásticas.
El planteamiento real no es realizar el referendum, sino trabajar por éste  pactando con el bipartidismo sus condiciones, y estos procesos tardan años en concretarse y esto pasa por la marginación del PSOE por parte de la izquierda.
¿Cómo se iniciaría el proceso? ¿Podrían los movimientos sociales surgidos a partir del 15 M y los partidos políticos aparecidos a partir del lunes, constituir el germen?
Quienes consideran un peligro el movimiento asambleario se preguntan qué pasó con el "No a la Guerra", que pasó con el 15 M y qué pasará con el movimiento recién surgido.
Los procesos transformativos adquieren vida propia y quizás años después se dirá que el inicio de la nueva transición estuvo en el 15 M. El sistema participativo en la toma de decisiones está bastante claro y se está poniendo en práctica; el 15 M supuso una cocina de aprendizaje, no de jun movimiento antisistema, sino antirégimen, de un régimen que nació al amparo de una dictadura de la que supuso la herencia. 

El pacto fundacional de la monarquía es la Ley de Amnistía. Pues bien, el advenimiento de una república supondría denunciar dicha ley de amnistía y poder procesar el franquismo. La monarquía huele a rancio y a desigualdad, en contra de ello se posicionan los nuevos movimientos sociales, movimientos que preconizan la igualdad. Pues bien, la IGUALDAD DE LOS CIUDADANOS FRENTE A LA LEY y el cumplimiento de los DERECHOS DE LOS CIUDADANOS, sería una república.


  

No hay comentarios:

Publicar un comentario